Recuento de un encierro obligado

Obligado ... y por mi misma :(

Hola mami querida y hermanos y sobrinos todos
Creo que nos podemos autodenominar, la familia ociosa??? Hay que comprender también que lo que pasa con el pobre BLOG, es que algunos miembros de la familia aún no terminan de integrarse a la cibernética, y se comunican sólo por el mail, lo que es una pena, por que el BLOG se mantiene como una especie de álbum familiar de noticias y fotos.
Para los que no se integran al BLOG, voy a mandarles una copia de esta nota, para que no queden "fuera" de las noticias.
Estoy tratando de incluir fotos... estoy en el proceso, paciencia, paciencia... (ustedes y yo).
Mientras tanto les cuento que este ha sido un mes, laaaaaargo y leeeeeento. Completamente limitada por la operación de los pies, con la consiguiente lentitud para hacer todo: sólo cuando duele algo, se da cuenta uno de lo difícil que es tratar de hacer las cosas sin hacer q te duela la parte involucrada :( :( : . Se topa una en todo, y en este caso sobre todo, te das cuenta de lo necesarios que son los pies para moverte a cualquier lado!!! (vaya noticia, no?). Tremendo esfuerzo para caminar hasta el baño, con muletas y todo, pero cómo duele... Una verdadera odisea bañarse... Pobre Mari, ahora supe lo que pasaste, y viviendo sola... :( Siguiendo el proceso, cuando ya podía caminar sola (pero con las muletas), vino el aprender de a subir y sobre todo BAJAR gradas!! Lo mejor fué "confinarme" durante el día a un sólo piso.
A las 2 semanas el médico ya me dijo que podía dejar las muletas. Y el equilibrio... donde se había ido?? Ja !...
Un par de veces he tratado de acelerar el reintegrarme a las actividades normales, y he sufrido unas pequeñas recaídas:
Ya desesperada, un jueves me vestí, llamé un taxi y fuí a almorzar con mis compañeras de colegio: en pantúflas obviamente, pues no había zapato que aguanten mis pies. Pa-pe-lón! como dirían los chicos... :) Pero salí.!! (Regresé a poner los pies en agüita con sal).
Un día el Fausto me llevó a buscar un par de zapatos que me permitan movilizarme fuera de casa: no encontramos nada y regresé agotada y frustrada.
Otro día, con el dato de unas tiendas ortopédicas, le pedí a una amiga que me lleve a buscar zapatos y con suerte encontré un par, que por tener además el pié grande, era EL par que podía comprar: alemanes, ortopédicos y carísimos, pero ya tengo algo para calzarme para salir de casa.
El fin de semana pasado se casó la hija de una amiga: me llevaron a que ayude a arreglar las flores; sentadita y todo... pero había q caminar laaaargo para llegar al baño y regresar. Y, de super novelera, en la noche fuimos al matrimonio en el Quito Tenis: de traje superformal y elegantísimo... y yo, con sandalias ortopédicas... ya no me va vergüenza alguna ..! Bien peinada, del brazo del Fausto y caminando muy tiesita y segura de mi misma.... y de que nadie iba a ver mis zapatos, jajaja. Y, para horror del Fausto, me levanté y le pedí que bailemos. Un sólo set, y pasé lindo!! Pero las consecuencias no se hicieron esperar: he tenido que poner los pies en remojo otra vez por unos cuantos días más.
Lo malo de esta obligada "desocupación", es que me ha dado demasiado tiempo para pensar en muuuuuchas cosas. De esto, ya les contaré en otra.
Por ahora les cuento que gracias a Dios, todos estamos bien. De Margarita saben, por que ella si se comunica y escribe en el BLOG. Fausto bien de salud y gracias a Dios con trabajo. Y Roberto bien, continuando con sus estudios en Boise.
Esta Navidad hemos planeado viajar a los EU para pasar con los hijos en casa de Margarita. Volaremos a Boise, y desde allí, apenas el Roberto termine sus exámenes, manejaremos a Walla Walla, donde esperamos poder reunirnos auque sea por poquitos días también con la Marisol, Mónica y Brock.
Al regreso, Fausto volará hasta Quito. Yo haré una parada "técnica": volaré con él hasta Atlanta y ahí tomaré una conexión a Orlando, pues tengo una cita el 9 con el cirujano para que me dé su opinión sobre las posibilidades de la cirugía que tendré que poner en el calendario del próximo año.
Tumbaco sigue lindo, pero no lo disfrutamos tanto como quisiéramos. Quito y el país lamentablemente perdiendo cada día más su tranquilidad y seguridad social: con un tránsito cada día más pesado y agresivo, no hay día ni hora en que no se sepa de asaltos, robos, asesinatos y secuestros. Podemos decir que nos hemos integrado -para mal- al gran colectivo mundial.
Pero bueno, hay que ver el lado positivo: todavía podemos darnos el lujo de poder reunirnos con amigos el fin de semana y a veces también entre semana.
Entre semana, sobre todo nos reunimos algunas amigas del club de jardinería: alguna mañana para aprender algo nuevo, o para dar alguna clase de horticultura a niños de escuelas, o de arreglos florales a personas q quieren aprender, como afición unas veces y otras para trabajar en eso. Y, de vez en cuando alguna tarde, para jugar una barajita.
También, con un grupo al que nos invitaron hace 3 años y nos reunimos una vez a la semana, para leer y estudiar la Biblia con la dirección de un sacerdote de la congregación de San Juan Eudes. Él es una persona muy apreciada por sus conocimientos y sobre todo por su capacidad y bondad cristiana y lo llevan fuera del país muchísimas veces a dictar cursos a sacerdotes y obispos, por lo que nos toca esperar a que regrese nuestro "asesor". Pero ha sido algo bueno para nosotros, pues es un sacerdote inteligente y que con los pies sobre la tierra, nos orienta a ver y vivir en el mundo de hoy.
Bueno familia querida, me e puesto al día. Espero que todos estén bien.
Les extraño mucho a todos